Uno de los aspectos más increÃbles de la paternidad es ver crecer y desarrollarse a su hijo. Sin embargo, no es raro que los padres observen ciertas caracterÃsticas fÃsicas que pueden ser motivo de preocupación. Se calcula que nacidos tiene una deformidad congénita del oÃdo externo. Otras deformidades del oÃdo son consecuencia de una lesión o traumatismo en la zona.
¿Qué significa esto para mi hijo?
Muchas deformidades de las orejas son puramente estéticas y no suponen ningún riesgo para la salud del niño. Algunas pueden requerir atención médica adicional, por lo que es importante plantear al pediatra cualquier preocupación que tenga sobre las orejas de su hijo. Aunque no sean peligrosas, las deformidades de las orejas pueden provocar problemas de autoestima, por lo que tratarlas a tiempo puede ayudar a su hijo a evitar esos problemas en el futuro.
"Con las anomalÃas de las orejas, hay muchas cosas que podemos hacer para ajustar el aspecto, pero algunas sólo se pueden hacer si la anomalÃa se detecta en las primeras semanas de vida", dice la doctora Sarah Akkina, cirujana plástica facial y reconstructiva de 91Â鶹ÌìÃÀÖ±²¥. "Si se detectan las cosas pronto se puede intentar moldear algunas de las estructuras de la oreja para mejorar el aspecto y evitar tener que hacer cirugÃas más complejas más adelante".
Los tratamientos más comunes para las deformidades de las orejas son:
- Moldeado de orejas: La mayorÃa de las deformidades congénitas se manifiestan al nacer, por lo que los padres pueden optar por corregir las orejas de su hijo con un moldeado auricular de inmediato. Este procedimiento consiste en que un médico coloque un molde a medida sobre la oreja del bebé para darle nueva forma en el transcurso de unas dos a cuatro semanas. Lo ideal es hacerlo cuando el bebé es un recién nacido y el cartÃlago de sus oÃdos es todavÃa lo suficientemente blando como para ajustarse.
- °ä¾±°ù³Ü²µÃ²¹:&²Ô²ú²õ±è;La cirugÃa del oÃdo, u otoplastia, puede ser una opción para los niños que no tuvieron éxito con el moldeado del oÃdo, o para los padres que optan por no perseguir el moldeado del oÃdo. Su médico trabajará con usted para hablar de la mejor opción para la condición particular de su hijo, pero por lo general recomiendan esperar hasta que los niños son alrededor de 5 a 7 años de edad antes de someterse a la cirugÃa.
"Para los bebés que nacen con una anomalÃa, ver de inmediato a un especialista es importante para que el moldeado sea una opción, pero desde luego no es el fin del mundo si se pasa ese plazo. Podemos intervenir en cualquier momento, incluso cuando las personas son adultas".
¿Cuáles son los tipos más comunes de anomalÃas del oÃdo externo?
Las deformidades de las orejas pueden ser congénitas, es decir, presentes al nacer, o adquiridas, es decir, causadas por una lesión o afección en etapas posteriores de la vida.
Deformidades congénitas del oÃdo
- Orejas prominentes: También llamadas orejas de soplillo o prominauris, sobresalen más de dos centÃmetros del lateral de la cabeza de tu hijo, independientemente del tamaño real de las orejas.
- Orejas constreñidas: Esta deformidad puede variar, pero normalmente consiste en que el borde de la oreja parece doblado.
- Oreja de Stahl: Orejas con forma puntiaguda causada por un pliegue extra de cartÃlago en la parte externa de la oreja.
- Criptotia: Cuando el cartÃlago de la parte superior de la oreja parece estar "enterrado" bajo la piel.
- Microtia: en esta enfermedad, el bebé nace con el oÃdo externo poco desarrollado. Los casos van de leves a graves. En los casos graves, el oÃdo externo puede estar completamente ausente. Los grados graves de microtia suelen presentar también pérdida de audición, por lo que es muy importante una intervención y atención médica tempranas.
"Cuando un paciente presenta anomalÃas más evidentes en el oÃdo externo, queremos asegurarnos de comprobar su audición lo antes posible", afirma Akkina. "La microtia también puede asociarse a algunos sÃndromes, por lo que es muy importante que esos bebés se sometan a un estudio completo con un equipo médico para asegurarnos de que se les evalúa en busca de otras anomalÃas o sÃndromes congénitos."
Deformidades auriculares adquiridas
- Oreja en coliflor: Cuando el oÃdo externo sufre traumatismos repetidos, la sangre se acumula alrededor del cartÃlago y hace que la oreja tenga un aspecto abultado. Esta afección es frecuente en luchadores, boxeadores y artistas marciales.
- Queloides auriculares: Tras un pequeño traumatismo o lesión, la oreja puede desarrollar tejido cicatricial que puede llegar a ser bastante grande. Los piercings son una de sus causas más frecuentes.
- Hemangiomas auriculares: Son tumores benignos que suelen desarrollarse en la infancia. Suelen resolverse por sà solos. En caso contrario, pueden tratarse con medicación o extirparse quirúrgicamente.
"En caso de traumatismo, consulte a un especialista de inmediato porque hay intervenciones que se pueden hacer pronto y que pueden evitar que se produzcan deformidades peores", dice Akkina. "Acudir a un especialista de inmediato puede ayudarle a entender cuál puede ser la trayectoria del tratamiento".
Por eso, si nota que las orejas de su hijo tienen un aspecto diferente, no se asuste. Consulte a su pediatra para obtener un diagnóstico y hablar sobre las opciones de tratamiento para garantizar el desarrollo y bienestar óptimos de su hijo.